XI Marcha Cicloturista "Sierra de Ayllón" - La crónica

Ya para terminar la temporada, al día siguiente (15 de septiembre) de hacer la Subida a la Quesera hice la XI Marcha Cicloturista "Sierra de Ayllón" (bici de montaña). Hace dos años no la hice por la cercanía con la boda de mi hermana y el año pasado tampoco por la caída que tuve en la bici de montaña unos días antes, así que tenía ganas de hacerla por fin sin percances. 63 kilómetros en el recorrido largo y 47 kilómetros en el corto. Por supuesto, no hay duda de que hice el largo :)

Como este año no he estado muy afortunado con el tema de las caídas, necesitaba coger algo de confianza con la BTT así que salí un par de veces las semanas previas y bueno, al menos me sirvió para ir con algo de soltura. De todos modos el objetivo número uno durante la marcha era no tener ningún percance, así que me tomé la primera mitad de subida con ganas y el resto, con mucha bajada y zonas de llaneo muy rápidas, con algo más de calma sin arriesgar lo más mínimo.

Este año también conseguí convencer a unos cuantos amigos del club, que vinieron a pasar el fin de semana a Valvieja. Así que el domingo por la mañana salimos directamente en bici hacia Ayllón Giselle, Paula, Jose, Dani, mi cuñado Roberto y yo. Mañana fresquita, pero nada que no se solucionase con unos manguitos. Además, para cuando avanzase la mañana la previsión era que iba a subir la temperatura, con el cielo totalmente despejado.

El recorrido había cambiado respecto a otros años desde la salida hasta un poco antes del primer avituallamiento. Esta vez se iba hasta Francos por un camino que no conocía, bastante ancho y en buen estado. Luego se cogía una senda estrechita y con pocas dificultades pero en la que fuí con bastante cuidado precisamente por la estrechez de la misma. Ahí ya me di cuenta de que el cambio de la bici me iba a dar guerra. Con el plato mediano metido y los piñones intermedios, cada vez que daba alguna pedalada fuerte saltaba el cambio al piñón inferior. No me había pasado en los días anteriores probando la bici, pero bueno, había que vivir con ello. Así que si quería ir con el plato mediano tenía que ser con el piñón más grande y afortunadamente con el plato grande o el pequeño no tenía problemas y me apañaba bien.

Alguna subida bastante dura en la que iba cazando a gente que me había pasado en la zona de la senda estrecha y ya en seguida nos plantamos en el primer avituallamiento. Como llevaba la mochila de hidratación en la espalda, no necesitaba "repostar" líquido y en cuanto a comida, por el momento iba bien. Así que no paré en este primer avituallamiento. Tocaba seguir subiendo hasta llegar a la cima del Puerto de los Infantes. Es una subida larga, no dura pero se hace pesada. Cogí a bastante gente en esta subida, que iba en solitario o como mucho en grupitos de 2 o 3, encontrándome fuerte y con ganas.

Una vez en el alto del puerto, queda más o menos la mitad de la prueba. Lo que queda ya es principalmente hacia abajo, con bajadas muy rápidas y zonas de llano donde se puede correr mucho también. Alguna subida aún hay que hacer, pero ya son pequeños repechos cortitos y duros, muy diferentes a la subida larga y tendida que acabábamos de terminar. Nada más coronar el puerto hay una bajada corta pero muy pronunciada, la más peligrosa de todo el recorrido en mi opinión, con mucha piedra suelta y algún pequeño reguero. Comencé a bajarla y la verdad es que en cuanto me pasó uno como un rayo me "acongojé" bastante y me llegué a bloquear, parándome y bajándome de la bici. Hice unos 100 metros andando hasta que ya la pendiente suavizaba un poco. No quería correr ningún riesgo y aunque me hubiera gustado hacerlo sin bajarme de la bici, creo que hice bien.

A partir de aquí fui con bastantes precauciones en todas las bajadas, intentando apretar algo en los llanos para recuperar parte del terreno perdido con la gente que me pasaba a toda pastilla bajando. Al llegar al segundo avituallamiento ya llevaba un tiempo con algo de hambre, así que decidí parar. Una Coca Cola rápida, unos frutos secos y en menos de tres minutos ya estaba pedaleando de nuevo.

Había todavía un tercer avituallamiento en Valvieja, únicamente de agua, pero de eso tenía suficiente así que no paré. Como siempre, bastante gente allí animando, que siempre viene muy bien. Ya desde allí quedaban unos 6-7 kilómetros y sin ninguna complicación, con una subida y el resto de llano donde se podía rodar muy rápido. Conseguí remontar unos cuantos puestos en esta última zona y ya entrar en Ayllón con cierta tranquilidad en una meta muy bonita situada en la plaza del pueblo.

Según la clasificación general terminé en el puesto 29 del recorrido largo de un total de 176 participantes que llegaron a meta con un tiempo de 3:14:12. Según mi Garmin mi tiempo fue de 3:23:11. La diferencia de tiempo se debe a que yo empecé a contar el tiempo desde el inicio en la plaza de Ayllón, contando incluso el recorrido neutralizado y el tiempo de verdad lo debieron empezar a contar cuando salimos del pueblo. Por dar algún número más, me salieron un total de 64.90 kilómetros, con una velocidad media de 19.2 km/h y un desnivel acumulado de 1053 metros.

Una vez terminada la prueba quedaba lo mejor, un bocadillo nada más terminar la prueba que me supo a gloria bendita. Y luego un par de horas después la paellita que nos dan a todos los participantes y que sirve para rematar un fin de semana buenísimo.

Y aquí termina la temporada 2012-2013. En principio tenía previsto participar en el triatlón sprint del BDream de Alicante, pero por no estar de acuerdo con ciertas decisiones y maneras de actuar de esta organización decidí no hacerlo. Próximamente vendrá la ya habitual entrada en el blog resumiendo como ha sido esta temporada.