Campeonato de España de Triatlón 2010 - La crónica

Llevo desde el sábado pensando en una palabra que resume como estoy después de la carrera del sábado y me cuesta mucho encontrarla. Por un lado encantado por haber tenido la oportunidad de participar en el Campeonato de España de Triatlón en este primer año que llevo metido en este mundillo. Por otro lado fastidiado por la carrera que me salió el sábado, que sinceramente creo que no refleja para nada mi estado de forma actual. Y por último contento por la actuación en general de todos mis amigos y compañeros de club, que lo han hecho genial y además con el premio del tercer puesto por equipos en la categoría élite masculina. Al final, intento quedarme con lo positivo del fin de semana y aprender de lo que no me salió bien para tratar de corregirlo en el futuro.

Pero bueno, vayamos como siempre por pasos y empezando desde el principio. Por fin llegó el esperado fin de semana del Campeonato de España de Triatlón. Durante la semana previa se me venía a la cabeza muchas veces la imagen de los “All-Star” de la NBA, donde en un mismo fin de semana se juntan los mejores del año, con la diferencia de que aquí hay títulos en juego para unos cuantos que tienen la posibilidad de poder disputarlos. Esta semana previa fue muy relajada en lo que a entrenos se refiere. Todo el trabajo ya estaba hecho y se trataba simplemente de mantener lo que ya hay sin riesgos ni lesiones y con algunos pequeños toques de calidad que hagan que el cuerpo no olvide los ritmos a los que te gustaría competir.

Pedí el viernes de vacaciones para preparar por la mañana todo tranquilamente sin agobios antes de salir a mediodía con mis amigos Isaac y Jose. Como suele ocurrir en estas ocasiones no lo conseguí y al final terminé preparando todo deprisa y corriendo a última hora. Menos mal que no se me olvidó nada…jejeje.

El caso es que partimos rumbo a Aguilas, donde estaba el hotel en el que nos alojamos. Allí estaba todo preparado, las cenas, desayunos y comidas concertadas a las horas que nos venían bien, sitio para dejar las bicis sin problemas, … Lo que notamos durante el viaje y una vez allí es calor, mucho pero que mucho calor. Hasta 43 grados llegamos a ver en una de las gasolineras en las que paramos durante el viaje. Y en Aguilas, quizá no tanto calor, pero con la humedad la sensación era de mucho bochorno.

Esa noche del viernes nos entregaron nuestra bolsita con los dorsales, gorro de natación, camiseta de recuerdo, … que se habían encargado de recoger por nosotros el resto de compañeros. El ambiente, como siempre, muy bueno con muchísima gente del club ocupando dos mesas enormes durante la cena.

Aquí estoy con mis compañeros de habitación Isaac y Carlos antes de ir a la salida

El sábado por la mañana nos acercamos a ver el recorrido de bici, para dar al menos una vuelta con el coche y ver lo que nos esperaba por la tarde. A todos nos pareció más duro de lo que nos habían dicho inicialmente, y encima con el calor que hacía mucho más. El caso es que el circuito tenía dos subidas, no muy duras, no muy largas pero que sin duda todos pensamos que iban a hacer bastante daño durante la carrera.

Ya por la tarde después de la comida y una ligera siesta nos vamos de nuevo a San Juan de los Terreros, en Pulpí (Almería), a la zona de boxes para dejar todo listo para la carrera. Como aparcamos un poco lejos aprovechamos para calentar un poco con la bici antes de ir hacia los boxes. Una vez allí todo eran colas. Una para que te pinten y te den el chip, otra para entrar a dejar la bici, luego a dejar las zapatillas de correr, otra para dejar la mochila en el ropero. Por lo que me cuentan el problema de las colas fue más grave para los que corrieron en la primera oleada, la de las cuatro y pico de la tarde. El caso es que la sensación que había allí era un poco de descontrol, como si aquello se le hubiese ido de las manos a la organización que no era capaz de manejar eficazmente a tanta gente. No hubo ningún tipo de control de material al entrar, vamos que ni te miraban la bici ni el casco ni nada. Esta vez no se me ocurrió como en Pareja y lo tenía todo listo y preparado, así que no se me olvidó nada de nada.

Con unos 20 minutos de retraso se dio la salida. El mar estaba bastante revuelto, con muchas olas y la verdad es que no me daba buena espina. Mi intención era tratar de nadar siguiendo a Manu todo lo que pudiera. Viendo como he nadado en las últimas semanas creo que podría haberle aguantado buena parte de la natación, aunque posiblemente no toda. El caso es que hasta la primera boya le voy siguiendo con un ritmo un poco forzado para mi pero consiguiéndolo. En la primera boya empiezan los golpes, gente que se te cruza, … y pierdo a Manu. Y a partir de ahí empieza el calvario de la natación. Empiezo a notarme perdido, muy desorientado y viendo las boyas muy muy lejos. Me doy cuenta perfectamente de que no voy recto y estoy haciendo metros de más, pero me cuesta mucho corregir la trayectoria. Para colmo, al ser el circuito a dos vueltas experimento por primera vez la sensación de salir de la playa y volver a entrar. En ese ratito que tienes que correr para salir del agua la sangre pasa a las piernas y cuando tienes que empezar a nadar de nuevo las sensaciones son horribles, vas con los brazos sin nada de fuerza, muy blanditos. Dicen que es normal, pero al ser la primera vez que lo experimento me da un bajón tremendo. El caso es que la segunda vuelta más de lo mismo, más o menos recto hasta la primera boya pero luego otra vez haciendo muchos metros de más hasta la segunda y de ahí hasta la playa. Con sólo ver esta imagen queda todo dicho de cómo fue mi natación:

Mi natación, que parece dibujada por un niño pequeño que coge un lápiz por primera vez

Se acaba la natación y salgo bastante desmoralizado. Creo reconocer la voz de Dani diciendo que estoy a 30 segundos. Luego se me olvidó preguntarle si fue él. Seguro que lo hizo para tratar de animarme, por que yo sabía perfectamente que me había caído una buena minutada nadando respecto a Manu e Isaac, que son las referencias que tenía y con los que creo que podía haber estado en la carrera viendo los entrenos de las últimas semanas.

La transición fue normal, ni muy buena ni muy mala. Pero salgo sólo en bici y sin ningún grupo claro a la vista. Me tiro así media vuelta hasta que me coje un grupo en el que veo que me coloco sin problemas. Ya en la segunda vuelta veo que en las subidas me pongo en cabeza del grupo y los dejo de rueda sin atacar realmente. Llega el llano y las bajadas y me encuentro de nuevo solo sin tener un grupo delante claro con el que intentar conectar. Mediada la segunda vuelta me coje un grupo que vienen a toda pastilla. Me uno a ellos y aquí si que veo que las cosas van bien y con un ritmo muy bueno. Hago la bajada y la subida de las rotondas fuerte con ellos y en el giro de 180 grados trato de colocarme un poco más adelante para no tener problemas. Y ocurre que en ese giro el que llevo delante se queda prácticamente clavado y yo detrás de él tratando de esquivarle para no caerme, me quedo casi parado hasta que consigo arrancar y me doy un buen calentón para tratar de enganchar con el grupo sin conseguirlo esta vez. Así que de nuevo me quedo en tierra de nadie sabiendo que ese grupo si que era el bueno en el que tenía que estar. Ya en la cuarta vuelta me vuelven a coger los del grupo inicial y termino con ellos lo que queda de bici.

Aquí voy en bici llegando a la segunda transición

Me coloco en segunda posición del grupo para hacer la segunda transición, que sale bastante bien, aunque es un poco extraña por lo de tener que dejar la bici “donde puedas” dentro de las barras que habían colocado al principio de la transición. Es la primera vez que lo veo, y aunque yo no tuve problemas de espacio no parece que hubiera sitio para todas las bicis en esas barras. El casco se tenía que dejar en la cesta donde estaban colocadas las zapatillas.

Salgo a correr y afortunadamente desde la última vuelta de la bici se nota que hace algo menos de calor. Habían salido unas cuantas nubes que estaban tapando el sol y la verdad es que se agradecía bastante. Además, con el retraso en la salida ya son casi las ocho cuando empezamos a correr así que el sol ya no aprieta tanto. El recorrido a pie son cuatro vueltas por el paseo marítimo en ligerísima subida a la ida y al contrario de vuelta. Ya veo que Manu e Isaac me sacan una buena minutada, algo menos de una vuelta corriendo. También veo a Ivan, otro compañero del club que no está demasiado lejos así que me pongo como objetivo tratar de alcanzarlo durante las dos primeras vueltas. Al acabar la primera voy a tomarme uno de los geles que tenía preparados y veo que el que me queda (se me había caído uno durante la bici) no es el que lleva algo de cafeína. Mala suerte, aunque al menos esta vez no tuve problemas de estómago como en otras ocasiones. Consigo alcanzar a Ivan y veo que tanto Manu como Isaac me han sacado un poco más de tiempo aunque no demasiado, como luego pude comprobar en las clasificaciones. El caso es que llego a meta apretando un poco más durante la última bajada y esprintando un poco para que no me cogiesen los dos a los que acababa de adelantar en esa bajada.

En plena carrera a pie, lo que mejor hice el sábado

Además de muy cansado termino la carrera un poco decepcionado, y más al comentar con la gente como le había ido la carrera. A todos les había salido bastante bien y yo no podía decir lo mismo. Pero bueno es lo que hay y traté de buscar cosas positivas. Así que me puse a pensar en que llevo muy poco tiempo en esto, que he mejorado bastante desde que empecé, en que conseguí clasificarme para poder estar aquí y que no todo el mundo tiene la oportunidad de hacerlo, … Aún así da rabia saber que tienes dentro mucho más de lo que has podido demostrar en la carrera. La siguiente es este próximo fin de semana en Valencia, el día 5. Allí se nada en mar pero dentro del puerto así que no creo que la orientación ni el oleaje sean esta vez un problema demasiado grave. Trataré allí de terminar mi temporada de triatlón con un buen sabor de boca.

De todo hay que aprender así que la lección más importante de esta carrera es que hay que mejorar la orientación nadando muchísimo. No puede ser que haga un recorrido como el que hice, tan desviado de la línea recta entre boyas. También tratar de estar más atento a los grupos de bici para que en los giros de 180º no me pase lo que me pasó en esta ocasión, aunque no fuese directamente culpa mía.

Los números de la carrera que grabé fueron estos:

• Natación: 1584 metros en 32:00 (2:01 min/100m)
• T1: 1:37
• Ciclismo: 37,05 km en 1:06:00 (33,7 km/h)
• T2: 0:56
• Carrera a pie: 10,07 km en 45:45 (4:33 min/km)
• Tiempo total: 2:26:19

Y los tiempos oficiales fueron:

• Natación: 1500 metros en 32:08 (2:09 min/100m)
• Ciclismo: 40 km en 1:08:30 (35,0 km/h)
• Carrera a pie: 10 km en 45:46 (4:35 min/km)
• Tiempo total: 2:26:24

He quedado en el puesto 133 de 180 inscritos, 165 participantes y 151 que consiguieron terminar la prueba en mi grupo de edad. La clasificación oficial está en este enlace.

Al día siguiente estaba el plato fuerte del fin de semana, las carreras élite masculina y femenina. Menudo espectáculo hubo en las dos pruebas, con gente de nivel mundial. En chicas Ainhoa Murúa, Ana Burgos, María Pujol, Zuriñe Rodríguez, Marina Damlaimcourt, … En chicos Gómez Noya, Eneko Llanos, Tovar, Josemi Pérez, … Además de eso había gente del club participando en las dos pruebas, lo cual era otro aliciente. En chicas ganó Murúa sin problemas haciendo toda la prueba en solitario y en chicos ganó Noya acompañado en la natación y bici y corriendo en solitario desde el principio sin verse amenazado en ningún momento.

Ainhoa Murúa en solitario desde que terminó la natación

Javier Gómez Noya entrando en meta en solitario

Por parte del club, Pedro Miguel Reig quedó en tercera posición en una gran carrera  Richard Moya quedó el 17 con un parcial a pie realmente espectacular (como dice Manu, Richard es que le hace saltar del sillón…) y también tercer puesto en categoría élite por equipos masculina. Muchísimo mérito ese resultado, sin duda. ¡¡ Enhorabuena a todos !!.

De izquierda a derecha: Jordi Pascual, Richard Moya y Pedro Miguel Reig

Y poco más que contar, aquí se acaba el “All-Star Weekend”. Muy contento por haber tenido la oportunidad de vivir la experiencia participando desde dentro y con mal sabor de boca por no haber tenido la oportunidad de sacar a relucir todo el entrenamiento realizado por culpa de una malísima natación. ¡¡ A ver si sale este domingo en Valencia !!.

Gracias a todos por los ánimos recibidos en carrera y al terminar. No quiero dar nombres por que seguro que me dejo a alguno y sería injusto, pero se os escuchaba alto y claro.

Todas las fotos del fin de semana se pueden encontrar en mi cuenta de Flickr, en este enlace.